Messi y su padre se les ha puesto bajo sospecha por haber defraudado, supuestamente, más de cuatro millones de euros en concepto de impuestos, a través de sociedades residentes en paraísos fiscales fuera de España. Sin embargo, de primeras sólo se había hablado de tres años económicos. Ahora podrían ser hasta seis.
Se conocerá si se amplía la investigación una vez que concluya la campaña de la renta de este año, aunque Messi y su padre podrían evitarlo si pagan las cantidades que se creen evadidas en estos tres nuevos periodos fiscales. Así mismo, según las informaciones, se podría llegar a un acuerdo mediante el cual, como respuesta al pago del dinero presuntamente defraudado, no se celebre ningún juicio, aunque sí haya sentencia de conformidad.
Este asunto ha golpeado de forma muy fuerte a la máxima estrella del Barça, sobre quien sobrevolaba un aura constante de humildad y bondad que ahora ha desaparecido. Messi está en el ojo del huracán, y quedará profundamente tocado ante la sociedad española si se confirman los presuntos delitos de los que está acusado.
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